Delegados del oficialismo y de la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) sostienen este viernes reuniones en República Dominicana en el marco del proceso de diálogo político que ambas fuerzas iniciaron el pasado 1 de diciembre en Santo Domingo y bajo supervisión internacional.

Se espera que las partes firmen acuerdos sobre los seis puntos de la agenda entre los que el oficialismo planteó el levantamiento de sanciones económicas contra sus funcionarios por parte de varios gobiernos y el reconocimiento de la ANC, un ente plenipotenciario impuesto por el chavismo sin un referendo previo.

Ante ello, Ledezma -exalcalde metropolitano de Caracas- y Machado -exdiputada- manifestaron hoy su rechazo, como han expresado también su inconformidad con todo el proceso de diálogo que, aseguran, busca dar continuidad a la “dictadura” de Maduro.

“Abrigamos la esperanza de que a nadie de le ocurra reconocer la ANC o solicitar el levantamiento de sanciones a individualidades señaladas por hechos de corrupción y violación de derechos humanos”, dice Ledezma en un vídeo que difundió a través de Twitter.

El exalcalde, que burló en noviembre el arresto domiciliario en que se encontraba desde 2015 y huyó a España, dijo que ceder en estos dos puntos “sería profanar las tumbas de los escuderos que murieron luchando por la libertad de Venezuela”, en alusión a los más de 120 muertos que dejaron las protestas de este año en el país caribeño.

Este mensaje fue saludado por Machado, quien remarcó que la ANC ha sido señalada de fraudulenta “por 50 países y por el Grupo de Lima” y fue rechazada por casi 8 millones de venezolanos en una consulta que realizó la MUD.

“En República Dominicana podrán decir lo que quieran; JAMÁS la reconoceremos”, agregó la exdiputada, líder de la formación política Vente Venezuela.

En las reuniones auspiciadas por el presidente dominicano, Danilo Medina, y el exjefe del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, la oposición también demanda la liberación de los que consideran “presos políticos”, un canal humanitario para el ingreso de medicinas y alimentos y el respeto al Parlamento; el único poder que dominan. EFE