“Nos reunimos hoy para conmemorar el Armisticio del 11 de noviembre de 1918 y lo hacemos en un contexto particular, este ano es el Centenario y tenemos proyectos concretos para la paz, hemos decidido junto con el Embajador de Alemania Daniel Kriener prolongar esta iniciativa en Venezuela y convertirla en un “Camino franco/alemán por la paz” y subrayar la voluntad política de construir y desarrollar la paz no solamente en todo el mundo porque pensamos que la reconciliación franco/ alemana tiene un significado profundo que puede interesar a otros pueblos de otros continentes sin dar lecciones, pero compartiendo la experiencia humana franco/alemana. Este día del 11 de noviembre es naturalmente el de la memoria, recuerdo de la fecha que se firmó en 1918 el Armisticio que marca el final de las batallas de la Primera Guerra Mundial, esta guerra que los contemporáneos llamaron la Gran Guerra, merece este término superlativo debido a varias razones, por las considerables pérdidas causadas por la guerra, más de 18 millones de personas muertos entre soldados y civiles; hasta el final de la guerra muchos extranjeros se incorporan al ejercito entre ellos unos cientos de latinoamericanos y algunos venezolanos que se comprometieron y sacrifican sus vidas por la libertad de Europa; no tiene precedentes en más de un sentido, por primera vez la movilización involucra 4 años a todos los ciudadanos marcando a miles de hombres y familias; se usaron armas químicas, su extrema brutalidad que recorto la fe en el progreso continuo que marco el final del siglo XIX. El armisticio fue el cese de la lucha, la suspensión de las hostilidades concertada de mutuo acuerdo de gran trascendencia histórica por las repercusiones que tuvo en los destinos de las civilizaciones, es una conmemoración de la paz, nuestra memoria nos permite identificar estas semillas de paz ya presentes que se puede construir un proceso de paz a pesar de sus vacilaciones y retrocesos gracias a una voluntad infatigable y gracias a los ciudadanos que lo desean”, dijo el Embajador de Francia en Venezuela, Romain Nadal al dar inicio al acto de Conmemoración de los 100 años del Armisticio de la Primera Guerra Mundial.

En ese sentido Daniel Kriener, Embajador de Alemania en Venezuela, destaco “Recordamos este evento del armisticio del 11 de noviembre de 1918 que nos sirva como lección para que comprendamos mejor lo que fue el conflicto brutal, para abordar lo que puede significar la reconciliación germano/francesa, para pueblos no solo de Europa sino de otros continentes, se enfrentaron a muerte y lo más importante que tuvimos que esperar 30 años más hasta después de la segunda guerra mundial para empezar a transitar la senda hacia la paz, no bastaba la muerte de 18 millones de personas para que esos hombres dejaran las armas y pusieran fin a la guerra. La voluntad fuerte de nuestros ciudadanos de los países fue fundamental para construir una paz duradera, hubo iniciativas admirables en nuestros gobiernos, aunque todavía había fragilidad de las incipientes instituciones democráticas y la debilidad de los políticos democráticos. Lo peor minaron la posibilidad real para edificar una buena paz. La historia nos ha ensenado a los alemanes y franceses que para lograr la paz hace falta mucho no solo detener los camiones y las balas que arrebatan vidas, hace falta mirar al ser humano, dirigir nuestra mirada hacia el otro , mantener su humanidad, una carta que se escribe, hay un dicho que dice “todo tiempo pasado fue mejor”, 100 años después pensamos que el pasado fue peor el presente entre Alemania y Francia es mejor por el esfuerzo que hicieron los gobiernos y las sociedades en las últimas décadas. Que hoy podamos reunirnos aquí con jóvenes de nuestros colegios y bajo nuestras banderas y arropados con la idea de Europa ya es suficiente para que los frutos de la buena paz nos entusiasme, trabajemos para que la experiencia sirva a todos, a nosotros y otros pueblos del mundo para que la paz duradera tenga fundamento en la vida de los individuos y en el florecimiento de sociedades democráticas y libres”

Por su parte Laura Márquez, Directora de Comunicaciones del Colegio Franciamanifestó “Estamos presentando un proyecto en conjunto con la Embajada de Francia y de Alemania se llama “Un camino para la paz” y hoy se inicia la conmemoración con los 100 años del armisticio por primera vez hacemos un acto con los dos Colegios dos Embajadas para celebrar la paz. Una representación variada por parte de los alumnos de ambos colegios, canciones, el coro del colegio Humboldt que son 26 niños, videos, lecturas de las cartas de los soldados, en el cual se destaca que al final el sufrimiento de ambos soldados es el mismo. Una ofrenda floral en frente de la placa donde están los nombres de los soldados que murieron en la guerra. Dos exposiciones dedicadas a los soldados venezolanos y de Anna Frank, trata de los valores de la paz y reconciliación tener en alto y evitar los conflictos. Dos colegios unidos, la importancia de los valores por el progreso y no discriminación, un acto no orientado hacia lo que fue la guerra, sino hacia lo que fue el proceso de reconstrucción de paz, el encuentro de los pueblos y de las naciones”

“Después que se anuncia el cese de la lucha, los apóstoles de la paz reflejan el deseo de evitar este flagelo y emprender un proceso de reconciliación, de comprometerse con varios principios. Esta paz era frágil y no fue la última guerra, debemos extraer lecciones. El fruto de un esfuerzo y trabajo permanente de Alemania Y Francia, para superar los odios de construir la reconciliación y la paz duradera fue un momento fundador en la historia de la humanidad el deseo de reconciliación ha generado una dinámica de acercamiento sin precedente en lo internacional por su intensidad y diversidad, compromiso conjunto de los dos ejércitos, resolución conjunta. Es una demostración de que la voluntad común y el recordar, reflexionar y actuar pueden hacer una reconciliación, una paz duradera que se encarna y se reinventa al comprometerse con la fuerza de transmitir la esperanza”, puntualizó el Embajador de Francia en Venezuela, Romain Nadal.

Elizabeth García Sanabria CNP/9409