Los sherpas negociaban en las últimas horas cada palabra del posible texto final, en medio de la férrea brecha entre Estados Unidos frente a China, Canadá y la Unión Europea por el proteccionismo y el "comercio justo" versus el libre comercio y la multilateralidad.
También el cambio climático y los principios de los Acuerdos de París dividen las aguas, y ahora más, luego de la alianza de Francia "con nuestros amigos de China" -anunciada en la víspera- en torno a un tema que irrita al presidente Donald Trump.
"Parece que los sherpas de la Cumbre de Buenos Aires pasaron toda la noche negociando el comunicado, sin un final a la vista al amanecer.", escribió en Twitter el académico canadiense John Kirton, un reputado conocedor del G20 y autor de numerosas publicaciones en la materia.
A la jornada de cierre se suma la canciller alemana, Angela Merkel, impedida de llegar a Buenos Aires antes por el desperfecto aéreo que la bloqueó en su país. Merkel arribó el sábado cuando caía la tarde en esta ciudad y a tiempo para la gala y posterior cena en el Teatro Colón, donde se la vio sonriente, a lado del anfitrión, el presidente Mauricio Macri.
Un encuentro crucial, previsto al margen de la cumbre, es la reunión bilateral con cena incluida que compartirán hoy los presidentes Trump y Xi Jinping. Las relaciones están atravesadas por la guerra de los aranceles, los cruces verbales y los tonos desafiantes de los últimos meses entre ambas potencias.
Consultado por ANSA sobre lo que se puede esperar de un imprevisible mandatario norteamericano, Kirton, director y cofundador del Grupo de Investigación G20, dijo que "depende mucho de cómo actué y cómo esté con los otros líderes". El académico recordó que cuando asistió a la cumbre del G7 realizada en Taormina, sur de Italia, en 2017, "no estaba de buen humor y eso afectó el ambiente de la cumbre, y ahora está peor".
Por lo que pudo saber ANSA de una fuente cercana al summit, sobre los temas en que existe acuerdo -dentro de una agenda que buscó la conflictividad cero- están la lucha contra el tráfico de personas y la corrupción en la esfera estatal y empresarial y la transparencia en el manejo de los fondos públicos.
Tras una cumbre de Hamburgo de 2017 donde no se pudo consensuar una declaración final, lo mismo sucedió la semana pasada -por primera vez en 25 años de historia, en la Cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), está aún por verse si la cita de Buenos Aires tendrá o no su documento firmado por todos los líderes. (ANSA).