Turín y toda Italia se unió hoy para rendir homenaje a las víctimas de Superga al conmemorarse el septuagésimo aniversario de la tragedia aérea que costó la vida de 31 personas, incluido el plantel completo del "Gran Torino".
Un equipo que hizo historia por aquellos años y que regresaba a casa tras disputar un amistoso a beneficio con Benfica en Lisboa cuando lo sorprendió la muerte junto con dirigentes, allegados y reconocidos periodistas, además de la tripulación.
Niebla y malas condiciones climáticas sumadas a un supuesto desperfecto mecánico y a un error del piloto se combinaron aquella tarde para cobrarse la vida de los 31 ocupantes de la aeronave, que se estrelló en la colina de Superga. Los 18 integrantes del plantel del "Gran Torino", que había conquistado cinco "scudettos" consecutivos entre 1942 y 1949, fallecieron en el accidente ocurrido a metros de la Basílica que domina la ciudad.
Sólo unos pocos lograron eludir la muerte como el zaguero Sauro Tomá, que no viajó porque estaba lesionado, el arquero Renato Gandolfi y el entonces presidente del club, Ferruccio Novo, afectado por una gripe.
Quien tuvo que verse cara a cara con la muerte fue Vittorio Pozzo, técnico de la selección nacional que había llevado a varios jugadores del "Gran Torino" a la "azzurra" y tuvo la triste tarea de identificar los cuerpos.
Toda Italia lloró a aquel plantel, que fue proclamado campeón post-mortem cuando restaban cuatro fechas para el final del campeonato (que Torino completó con una formación juvenil) y casi un millón de personas participaron de los funerales.
"Los héroes son inmortales por siempre", afirmó hoy Gianluigi Buffon, ex arquero de la "azzurra" y de Juventus, en un mensaje publicado en la red social Twitter en el que parafraseó a Indro Montanelli.
"Los jóvenes creerán que el Torino no murió. Sólo está en viaje", completó el hoy arquero del París Saint Germain al recordar a un "Gran Torino" al que también le rindió homenaje el club argentino River Plate.
"Hace 70 años, a partir de un enorme dolor nacía una gran amistad, que hoy está más presente que nunca. Torino y River, River y Torino", publicó el club "millonario" en la misma red social en la que el club turinés respondió: "Gracias amigos".
El actual plantel "granate", que en la víspera empató 1-1 en el "Derby della Mole" disputado en campo de Juventus, participó hoy de una misa en homenaje celebrada por el capellán del club, Riccardo Robella.
Dirigentes presididos por Urbano Cairo, cuerpo técnico y el equipo completo de Walter Mazzarri, encabezado por el goleador Andrea Belotti, se unieron a los familiares de las víctimas para recordarlas.
Rompiendo un jarrón y repartiendo los pedazos, Robella dijo: "Todos debemos llevar en el corazón un trozo de este equipo que no renacerá, pero se levantará de nuevo. Somos custodios de su historia, pero nadie es portador exclusivo de la memoria".
En nombre de la ciudad, la alcadesa Chiara Appendino afirmó que "el Gran Torino no le pertenece sólo a los fanáticos granates, sino que representa la historia misma de este deporte".
"Quien ama al deporte debe amar a ese equipo y es justo que la ciudad honre su memoria", agregó Appendino, que participó de los actos de homenaje y de la misa en el Duomo de Turín y que el lunes recibirá en la sede del municipio a Cairo.
El presidente del Torino también recordó a los "Invencibles" y aseguró que "el recuerdo de aquel equipo permanece más vivo que nunca y se refleja en la enorme convocatoria que registró el homenaje para recodar a los caídos en Superga".
"Pararse frente a sus tumbas fue algo realmente fuerte", dijo Cairo en el Cementerio Monumental antes de asegurar que los integrantes de aquel "Gran Torino" "no eran sólo grandes campeones que hicieron historia, sino grandes personas".
"Pasaron 70 años, pero el recuerdo del Gran Torino y de las víctimas de Superga sigue vivo", coincidió Gabriele Gravina, presidente de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC), en un mensaje vía Twitter.
"Aquel fue uno de los mejores equipos de todos los tiempos, un acorazado invencible integrado por campeones que defendían también la casaca azzurra y que supieron enamorar a millones de italianos", completó.
"Para muchos, en aquel accidente no sólo murió un gran grupo de futbolistas, sino un sueño con muchos significados", aseguró por su parte Sergio Chiamparino, presidente de la región de Piemonte, quien recordó: "Yo era apenas un bebé por entonces".
"Con los años comprendí que la tragedia de Superga era una herida abierta en todo un pueblo", completó mientras que Gateano Micciché, titular de la Liga de la Serie A, dijo "haber crecido junto con el mito de aquel equipo".
"Nuestro fútbol necesita recuperar los valores del Gran Torino, que no eran otros que la lealtad, la corrección y la amistad. Nosotros tenemos la obligación de transmitir lo que representó a las nuevas generaciones", agregó.
El presidente de la República, Sergio Mattarella, también recordó a las víctimas de la tragedia, que calificó como "una página imborrable" de la historia italiana que "aquellos jóvenes empezaban a reescribir luego de los horrores de la guerra".