Print this page
Mercoledì, 21 Agosto 2019 17:28

Conte renuncia y arremete duro contra Salvini El premier, durísimo en su último discurso en el Parlamento

Written by 
Rate this item
(0 votes)

En su último día al frente del gobierno italiano, Giuseppe Conte dejó de lado el aplomo y el tono elegante que lo caracterizan y golpeó duro, con la fuerza de quien sabe que tiene en la manga la arenga perfecta y contra un solo imputado: el ministro del Interior Matteo Salvini.


En el Senado, Conte acusó hoy al exaliado de gobierno, el ala derecha (Lega), de haber provocado la crisis solo por "intereses personales y partidarios".
Y como temía que esta acusación pudiese no resultar demasiado dura -y que el pensamiento oculto de todos los presentes pudiese ser "¿Y quién no lo hubiese hecho en lugar de Salvini?"-, Conte arremetió directamente contra el líder de la Lega. "Te escuché pedir plenos poderes e invocar manifestaciones en tu apoyo, esta concepción tuya me preocupa", le dijo. Además, irónicamente, le dijo que "mostrar el rosario es símbolo de inconciencia religiosa".
Por último, dirigiéndose al auditorio, Conte sostuvo que Salvini "mostró escasa responsabilidad institucional y grave carencia de cultura constitucional".
En síntesis: él, que es profesor, lo trató de ignorante. La evolución de Conte y los primeros distanciamientos del incómodo aliado comenzaron a manifestarse justamente en el Parlamento, cuando el premier tuvo que hablar de los presuntos fondos rusos que recibía la Lega, provenientes del petróleo.
En esa oportunidad, la sola presencia de Conte en el aula remarcó el hecho de que Salvini, el principal señalado, no lo estaba haciendo.
El premier se lo enrostró también hoy, en su último discurso: "Debías venir tú".
Vale recordar que aquel tema había salido a la luz tras las elecciones europeas de mayo pasado, cuando el portal BuzzFeed había develado el contenido de una grabación en la que la mano derecha de Salvini, Gianluca Savoini, decía a interlocutores rusos en un hotel de Moscú que la la Lega quería "cambiar a Europa" para que fuera "más cerana al Kremlin".
Básicamente, se trataba de recibir financiación para facilitar la interferencia rusa en aquellos comicios, lo que auguraba un eventual "Russiagate a la italiana". La investigación está a cargo del Departamnto de Delitos Económicos Transnacionales de la Fiscalía de Milán. Conte había llegado a Roma en silencio. Él, sin partido y sin votos en su haber, había ingresado al Palazzo Chigi (sede del gobierno) gracias a la recomendación del partido Cinque Stelle (M5S), pero con el beneplácito de la Lega.
Era consciente de que debía remar entre aliados difíciles, que debía ser el premier de dos vice incómodos y que tendría que mediar y limar asperezas. Por eso mantuvo un perfil institucional. Pero no dudó en alzar la voz cuando consideró que era necesario. Después de todo, el punto de inflexión decisivo lo marco él cuando le dijo que "sí" al proyecto de línea de tren de alta velocidad entre Francia e Italia (TAV), lo que, de hecho, provocó una fractura letal para el gobierno.
El controvertido proyecto fue el principio del fin: los aliados votaron en el Senado de manera opuesta y el texto a favor de la obra fue aprobado tal como pedía Salvini, mientras que el M5S quedó en minoría. Hace algún tiempo, Conte había convocado una conferencia de prensa para decir que él no era un mediocre, que la Lega y Cinque Stelle debían dejar de pelear y de insultarse y ponerse finalmente de acuerdo: o lograban un acuerdo serio y decidían que el gobierno continuaría sin vacilaciones, o él arrastraría sus consecuencias. Eso fue en junio pasado. Se necesitó tiempo. También, fue necesario un duro enfrentamiento sobre el TAV. Y una moción de desconfianza de la Lega. Y Conte, efectivamente, arrastró las consecuencias. (ANSA).

Read 453 times