A los 39 años de edad, la campeona de Roland Garros en 2010 decidió dirigirse a sus seguidores en las redes sociales para explicar por qué hacía tanto tiempo no se sabía nada de ella.
En primera persona y con impactante aplomo, Schiavone confesó: "Estuve en silencio en los últimos siete meses porque llevé a cabo una dura batalla".
"Me diagnosticaron un tumor maligno y debí someterme a un tratamiento de quimioterapia. Fue el partido más difícil que debí afrontar en mi vida, pero logré superarlo", explicó.
"Cuando me lo confirmaron (que estaba curada, Ndr), estallé de alegría y hoy vivo feliz y lista para enfrentar nuevos desafíos y proyectos que no podía realizar", agregó.
"Nos volveremos a ver pronto. Estoy feliz de lo que soy hoy", completó la italiana, que se retiró del tenis profesional en septiembre del año pasado.
Un mensaje conmovedor de apenas 55 segundos de duración en los que lució emocionada, pero serena y que representa un canto a la vida.
La dama que supo ocupar el cuarto puesto del ranking WTA (sólo su compatriota Adriano Panatta logró llegar tan alto) y que puso al tenis italiano de relieve, hoy vuelve a sorprender.
Su adiós a las canchas llegó tras su última participación en el US Open, cuando anunció: "He realizado mis sueños", aunque su triunfo en Francia fue su mayor suceso.
La final ganada frente a la australiana Samanta Stosur la convirtió en la primera italiana en conquistar un Grand Slam y marcó un camino.
Senda que siguió luego Flavia Pennetta al consagrarse campeona cinco años después en el mismo US Open que más tarde serviría como escenario para la despedida de Schiavone.
Su estilo de juego combativo y su decisión de nunca darse por vencida le hizo acreedora del apodo "Leona", que ahora refrendó en la vida en su batalla mas dura.
Schiavone es una luchadora nata y su victoria emociona como emociona ver al serbio Sinisa Mihajlovic pelear contra la leucemia mientras entrena al Bologna.
La ex tenista se suma a la lista de deportistas que debieron luchar contra la enfermedad, como la voleibolista Elenora Lo Bianco, quien derrotó un tumor de seno en tiempo record.
Francesco Acerbi, futbolista de Lazio y de la selección, también combatió contra un tumor en los testículos y es otro ejemplo de esa lucha.
Hoy, Schiavone, que a lo largo de su carrera profesional sumó ocho títulos individuales y otros siete en dobles, derrotó al rival más terrible y sigue en carrera.
La esperan ansiosos sus discípulos pues la tenista es actualmente entrenadora en esta nueva etapa de su vida, que quiere disfrutar a pleno, tal como lo merece.(ANSA).