Milan, que venía de golear 3-0 a Lazio en la fecha anterior, dio la sorpresa hoy al derrotar por 4-2 al líder Juventus, que a sólo siete fechas para el final del torneo pudo haber hipotecado el "scudetto".
Gran faena del "rossonero" de Stefano Pioli, que no sólo remontó dos goles de desventaja en San Siro que sufrió en el complemento, sino que lo hizo con tres en apenas cinco minutos para llevarse una victoria tremenda desde lo anímico.
Ya lo había sido aquella categórica que logró en el Olímpico dejando a Lazio sin invicto como local en el campeonato, pero hoy lo refrendó con un triunfo de esos que todo hincha sueña con ver alguna vez.
No es, sin embargo, la primera vez que Milan pone en apuros a Juventus, que no había podido doblegarlo tampoco en las dos que chocaron por las semifinales en Copa Italia, pues empataron 1-1 en San Siro y sin goles en Turín en la revancha.
Casi tres meses pasaron entre ambos duelos debido al parate obligado por la pandemia de Covid-19, y al final fue Juventus el que sacó pasaje a la final (que perdió por penales con Napoli) gracias al gol convertido en la ida.
Gol que llegó con un penal dudoso sobre la hora que aquella vez trocó por gol el portugués Cristiano Ronaldo, quien hoy volvió a festejar a los 53' para el 2-0 parcial pues el francés Adrian Rabiot abrió la cuenta a los 47' para el visitante.
Todo presagiaba una nueva victoria del equipo de Maurizio Sarri, que resolvió varios de sus últimos partidos en el complemento, pero Milan no bajó los brazos y achicó distancias con un penal convertido a los 62' por Zlatan Ibrahimovic.
Fue por una mano de Leonardo Bonucci que el árbitro Marco Guida sancionó tras revisar la jugada en el VAR advertido por sus asistentes y que el recuperado delantero sueco trocó por gol desde los 12 pasos (venía de marcar otro por esa vía). El descuento pareció animar al local, que fue por más y logró el empate por intermeedio del marfileño Franck Kessié a los 66' y mientras Juventus intentaba salir de su asombró lo dio vuelta un minuto después con otro del portugués Rafael Leão.
Sarri metió tres cambios simultáneos, uno de ellos por el argentino Gonzalo Higuaín (titular hoy por la sanción que purgó su compatriota Paulo Dybala) buscando recuperar terreno y estuvo cerca de lograr el empate con Daniele Rugani.
Se lo impidió Gianluigi Donnarumma, quien con una gran intervención sostuvo una victoria que terminó siendo más amplia gracias a un error del brasileño Alex Sandro, apenas ingresado por el colombiano Juan Guillermo Cuadrado.
El lateral jugó el balón en su área hacia el medio y no hizo más que habilitar a Giacomo Bonaventura, quien sin perder tiempo le cedió la pelota al croata Ante Rebic para que asegurase la victoria a los 80'.
Un golpe de nocaut para Juventus, que no logró torcer la historia ni siquiera en los seis minutos adicionados por el árbitro y dejó pasar una gran ocasión para hipotecar el "scudetto".
Guiño para Lazio, que tras la goleada a manos de Milan hoy volvió a caer (tercera derrota desde que se reanudó el fútbol) en campo de un Lecce que se impuso por 2-1 más temprano, salió momentáneamente de la zona de descenso y sueña con salvarse.
El traspié de Juventus le permite mantenerse a siete puntos de distancia a Lazio, que debería pensar en sí mismo si pretende mantener alguna aspiración y que puede quedar a tiro de Inter si el "nerazzurro" de Antonio Conte supera a Hellas en Verona.
Será el jueves, en uno de los partidos de que cerrarán la fecha en la que el otro "nerazzurro", el Atalanta de Gian Piero Gasperini, recibirá mañana Sampdoria con la chance de quedar a nueve de la cima si gana y debiendo jugar aún con Juventus.
Milan, en tanto, pelea por afirmarse en zona de clasificación a la Europa League, disputa en la que el triunfo de esta noche lo deja mejor parado pues supera ahora por un punto a Roma y a Napoli, ambos con un partido menos.
Pero lo más importante hoy seguramente para sus aficionados es que el equipo le ganó a los dos grandes contendientes al título y parece haber recuperado la memoria de la mano de un Pioli que hasta hace muy poco era seriamente cuestionado. (ANSA).