El jurado reconoció su dominio en un amplio registro de géneros, "que lo ha llevado a rescatar composiciones, realizar direcciones orquestales, música para la historia de Chile, melodías para distintas comedias musicales y también composiciones religiosas y populares". Postulado una decena de veces anteriores, hoy por motivos de salud no puso trasladarse hasta el Ministerio de Educación y debió ser informado en su casa.

En contacto telefónico con radio Cooperativa se declaró "feliz porque este premio tanto tiempo buscado, ha sido un empujón tan grande a mi vida, en estos tiempos que ya poco me queda. Lo agradezco por todo lo que vale". Pese a los años de retraso, "de todas maneras, es muy valioso, muy valioso. Muy grande. Me siento entre los grandes de Chile. Muchas gracias" reseña Ansa.

Multifacético, a los 17 años ingresó al mundo de la radio, que lo llevó a trabajar como radiodifusor y a formar sus primeras orquestas profesionales. Luego de varios viajes fuera del país -donde cosechó gran éxito, especialmente en Perú- regresó definitivamente a Chile en 1955. En esa misma época comenzó a trabajar sobre textos del poeta Pablo Neruda, con quien conformó por años una dupla creativa. En una oportunidad contó que el poeta le pasó el poema sobre el guerrillero Manuel Rodríguez y tras musicalizarlo y tener que repetir algunos versos, el vate se mostró fascinado por lo que le entregó otros dos poemas. Así nacieron las Tonadas de Manuel Rodríguez (1955), Romance de los Carrera (1956), Canto a Bernardo O'Higgins (1956), tres luchadores de la Independencia. Bianchi posee más de 150 obras para piano, canto y orquesta y más de 300 grabaciones. Compuso obras religiosas, villancicos, "música para la historia de Chile", himnos y marchas, música sinfónica chilena y peruana.

Creó composiciones para películas, documentales, avisos comerciales para televisión y radio, y canciones que compitieron en el Festival de la Canción de Viña del Mar. Participó como pianista, arreglador y director de orquesta en conciertos de figuras destacadas de la música, tanto de Chile como del extranjero. Además realizó gran cantidad de grabaciones para EMI-Odeon y Capitol Records.

Creador de la Misa a la Chilena (1964), la Misa de la Cruz del Sur (1970) y el tradicional Te Deum ecuménico (1969-2000) de Fiestas Patrias, que inició junto al recordado cardenal arzobispo de Santiago, Raúl Silva Henríquez.