La reseña, que promueve las más novedosas producciones de los países andinos, tendrá lugar del 15 al 22 de octubre en la provincia de Jujuy, noroeste argentino.
"Los países unidos por la cordillera comparten una cultura común, sin embargo su cine es bien diverso. Por eso nació esta iniciativa", recordó uno de los directores artísticos del festival Daniel Desaloms, en diálogo con la prensa. Veinticuatro largometrajes -doce de ficción y doce documentales- integran las dos competencias oficiales que buscarán llevarse el premio mayor: la estatuilla "Pachamama" y cien mil pesos argentinos ($100.000) o su equivalente en dólares.
El festival, que cuenta con el apoyo del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales de Argentina (INCAA); la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas y el Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (BAFICI), nació en 2014 para difundir la cultura de la región andina, es decir, de aquellos países latinoamericanos unidos por la Cordillera de los Andes.
Por su parte, el intendente de San Salvador de Jujuy, Raúl Jorge destacó que no es casual la elección de la provincia argentina para convocar este encuentro, organizado por en forma conjunta entre las autoridades provinciales y municipales. "Jujuy es el portal de los Andes hacia Argentina y la más latinoamericana de nuestro país", subrayó.
La provincia del NOA (noroeste) argentino expresa sin duda la diversidad cultural andina, que se aprecia en las distintas cintas elegidas para esta nueva edición. Como "Alba", de la ecuatoriana Ana Cristina Barragán -premiada en el Festival de Cine Latinoamericano de Toulose-, abrirá la competencia de ficción, y a través de un relato íntimo sobre la preadolescencia da cuenta de otras realidades actuales.
Juan Francisco Olea hace una pintura de Chile como país conservador y tradicionalista a través del protagonista de "El Cordero", mientras que "Dauna, lo que se lleva el río"-estrenada en el Festival de Berlín, del cubano radicado en Venezuela Mario Crespo, desmenuza las dificultades de mantener algunas tradiciones en el seno de la comunidad warao, pueblo indígena del delta del Orinoco. En tanto, "Rosa Chumbe", la particular historia de una mujer policía, ópera prima del peruano Jonatan Relayze, se desarrola en Lima, en el marco de la fiesta religiosa en honor al Señor de los Milagros, cuando la ciudad se viste de color morado y la fe se vive con intensidad. De algún modo, todas las películas permiten viajar por los países andinos desde la butaca de cine y también reconocer similitudes entre tradiciones, prácticas culturales y penurias de los países hilvanados por la cordillera. Completan la sección competitiva de ficción, entre otros, la coproducción paraguayo-argentina "Guaraní", de Luis Zorraquín; "Sol, piedra, agua", ópera prima de Diego Revollo que representó a Bolivia en los Premios Goya; y los argentinos "Hijos nuestros", de Juan Fernández Gebauer y Nicolás Suárez; "Lo que no se perdona", de Cristian Maximiliano Barroso y "Primero Enero", de Darío Mascambroni.
Los documentales, por su parte abordan temas como la minería ilegal, la identidad cultural, los primeros movimientos revolucionarios bolivianos y la relación a lo largo de la historia -que llega hasta hoy- de los conquistadores con los pueblos originarios latinoamericanos. La sección competitiva incluye, entre otros, "Kuyujani envenenado", de la venezolana Alexandra Henao; "Hija de la laguna", del Peruano Ernesto Ceballos; los bolivianos "Movimientos espectaculares", de boliviano Mateo Hinojosa y "Mujeres de la mina", de Malena Bystrowicz y Loreley Unamuno y los argentino "Arreo, de Néstor Moreno; "Canción perdida en la nieve", de Francisco D'Eufemia y "Damiana Kryygi", de Alejandro Fernández Mouján. Otras películas podrán verse en las secciones fuera de competencia como Sección BAFICI -ofrece un panorama del cine independiente mundial exhibido en el Festival de Cine Independiente de Buenos Aires en 2016-; Selección Academia filmes argentinos seleccionados por la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas e Argentina y Panorama NOA, filmes de corto, medio y largo metraje realizados por cineastas de la región argentina. El país homenajeado este año es Bolivia, por lo tanto se exhibirán varias producciones desconocidas de ese país y se realizará un homenaje al director de cine Luis Espinal Camps, -también sacerdote jesuita y periodista, asesinado en 1980 por la dictadura boliviana, en el marco del llamado Plan Cóndor-, comprometido con la lucha contra la injusticia social y los abusos de poder. En el marco del festival habrá mesas redondas sobre distintos temas, proyecciones en distintos barrios de la provincia y debates. Aunque la gran novedad de esta edición es la creación de un Ente Autárquico destinado a promover intercambios culturales, especialmente orientado a la producción audiovisual, entre los países andinos. Una semilla que en el futuro puede dar nacimiento a un mercado común de películas. (ANSA)