Estambul (Turquía ) - Por primera vez después del fallido golpe de estado y de la posterior purga iniciada por Erdogan, la oposición turca sale a la calle.
Impresionante marea de banderas rojas en la capital de Turquía a favor de la democracia. Convocados por diferentes partidos políticos, se han manifestado, unidos, para condenar tanto el fallido golpe militar del pasado 15 de julio como las medidas tomadas por el presidente turco.
Ankara (Turquía) – El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha declarado el estado de emergencia en todo el territorio nacional, tras el intento de golpe de Estado lanzado el pasado viernes.
Ankara (Turquía) - El Consejo Superior de Educación de Turquía ha pedido hoy la dimisión a 1.577 decanos universitarios, informó la cadena de televisión CNNTürk.
Bruselas (UE) - La jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, recordó hoy a Turquía que "ningún país" puede convertirse en Estado miembro de la Unión Europea (UE) si introduce o reintroduce la pena de muerte.
Bruselas (UE) - El comisario europeo de Ampliación, Johannes Hahn, ha denunciado este lunes que la lista de magistrados detenidos en Turquía tras el fallido golpe de Estado parece que estaba ya "preparada" antes del intento de asonada.
Ankara (Turquía) El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha comparecido este sábado ante una multitud que pedía la reinstauración de la pena de muerte para perseguir a los responsables del intento de golpe de Estado y ha respondido que será el Parlamento el que aborde esta posibilidad.
Ankara (Turquía) En Turquía, después de un golpe militar fallido, no ha llegado la calma sino la represión. Detención de los que se rinden y los que resisten a abandonar. Soldados como él que, quizás por miedo a la multitud, no quieren dejar del tanque ni a patadas ni con gases lacrimógenos. Al final salen de la mano de un agente de policía -leal al gobierno de Erdogan.
Ankara (Turquía) - El fallido y sangriento golpe de Estado que sacudió a Turquía en las últimas horas parece haber debilitado al Ejército y reforzado al presidente del país, el islamista Recep Tayyip Erdogan, y su aspiración de tener en sus manos más poder.
De acuerdo con el más reciente balance, 161 personas han muerto, 1.440 han resultado heridas, al menos 2.839 militares ha sido detenidos y decenas de soldados golpistas murieron en la intentona.
Fue la cuarta asonada fallida en la historia de la República de Turquía tras otros tres golpes, en 1960, 1971 y 1980, aunque este intento se diferencia en mucho de sus antecesores, reseña EFE.
Esta vez, parece haberse corroborado la teoría de que un golpe no puede tener éxito en la era de los medios digitales.
En 1960, 1971 y 1980, lo primero que hicieron los militares fue tomar el control de la radio y la televisión, pero esta vez, si bien también lo intentaron con algunas emisoras de televisión, su poder sobre ellas duró poco rato y la mayoría de los medios pudo continuar trabajando en defensa de la democracia.
Los políticos habían logrado movilizar la resistencia de las televisiones afectadas, como la CNNTürk y la estatal TRT.
Los medios pudieron transmitir sendos mensajes de los políticos instando a la población a salir a las calles, e informar amplia y rápidamente de lo que estaba pasando.
Además, fue la primera vez que la población no permaneció en silencio frente al levantamiento militar: decenas de miles de personas salieron a las calles para resistir a los golpistas.
Los ciudadanos tomaron las plazas, saltaron encima de los tanques y se enfrentaron verbalmente a los soldados.
También por primera vez, todos los partidos políticos del país fueron unánimes en rechazar la asonada.
Asimismo, la Policía, la Gendarmería y una parte del Ejército se mantuvieron fieles al gobierno del primer ministro, Benali Yildirim, líder del islamista Partido Justicia y Desarrollo (AKP).
Pero también fue un triste estreno el bombardeo por parte de los golpistas del edificio del Parlamento turco, en Ankara, que resultó seriamente dañado, y tampoco nunca antes había sido atacada una residencia veraniega del presidente, como ocurrió anoche.
Fue también la primera vez que durante un intento golpista la población pudo presenciar en las pantallas cómo se rendían los soldados con las manos en la cabeza, tumbados en el suelo y cómo se les despojaba de sus uniformes y armas.
El Ejército turco, uno de los mayores del mundo y la institución hasta ahora más fuerte del país, con sus miembros considerados durante años como "intocables", se vio, también por primera vez, en una situación penosa.
Pero tampoco nunca antes la Policía se había enfrentado al Ejército ni un golpe había sido tan sangriento, con un número inédito de muertos, heridos y detenidos.
A diferencia de lo que ocurrió en las anteriores ocasiones, el Servicio Nacional de Inteligencia (MIT) fue ayer atacado por los golpistas, cuando antes había sido siempre acusado de haberse confabulado con los militares rebeldes.
Esta vez, el MIT se mantuvo leal al gobierno y al presidente, a quienes no pudo informar sobre las preparaciones del intento golpista, que sin duda requirieron mucho tiempo, algo que deja de manifiesto fallos importantes en la inteligencia del país.
En sus primeras palabras tras la intentona, Erdogan consideró en Estambul que ahora tenía ante sí una oportunidad para limpiar el Ejército de los seguidores del predicador islamista Fethullah Gülen, antiguo aliado suyo considerado ahora enemigo y terrorista.
No obstante, el grupo de Gülen rechazó hoy las acusaciones desde Estados Unidos, donde vive exiliado el predicador.
Los turcos han defendido con fuerza su democracia pero por otro lado ha crecido en los círculos opositores la preocupación de que Erdogan haya salido de esta crisis aún más fortalecido.
Un primer indicio de este fortalecimiento podría ser la purga que se ha efectuado en el sistema judicial, con el despido de 2.745 jueces, sospechosos de estar relacionados con Gülen.
Erdogan aspira a cambiar la Constitución para convertir la actual república parlamentaria en una presidencialista.
Eso le daría aún más poder del que ya tiene por ser el hombre fuerte del AKP, partido que él fundó, si bien formalmente lo ha abandonado para poder ascender a la jefatura del Estado.
Erdogan es visto cada vez con más recelo por la oposición, así como por políticos en el extranjero, debido a su creciente autoritarismo y su tendencia a perseguir a cualquiera que lo critique, incluyendo la prensa, por lo que ahora se teme que pueda avanzar hacia un poder casi totalitario.
Ankara (Turquía) - Tras el fallido golpe militar en Turquía, un total de 2.745 jueces fueron destituidos por la Junta Superior de Jueces y Fiscales del país eurasiático.