La cantante estadounidense Ariana Grande aseguró que sufre de trastorno por estrés postraumático luego del atentado terrorista de hace poco más de un año en una de sus presentaciones en Manchester, Inglaterra.
Así lo reveló la joven de 24 años a la edición británica de la revista Vogue, según consta en adelantos a la prensa de una entrevista que será publicada el próximo viernes. La cantante de Boca Ratón, Florida, explicó que no puede hablar del acontecimiento sin romper en llanto, puesto que "muchas personas han sufrido graves y tremendas pérdidas". "Sé que esas familias, mis fans y todo el mundo experimentaron una tremenda pérdida", dijo sobre un drama del que siente que "ni siquiera debería hablar" al compararlo con su propia experiencia. "No creo que alguna vez sepa cómo hablar sobre eso y no llorar", continuó la joven, quien luego del fatídico concierto de hace un año, ofreció un show benéfico y colaboró en actos y encuentros con sus seguidores. "Creo que mucha gente tiene ansiedad, especialmente hoy en día. Hasta mi ansiedad tiene ansiedad", dijo Grande a la revista. "Siempre he tenido ansiedad. Nunca he hablado de eso porque pensé que todos la tenían, pero cuando llegué a casa después de la gira, fue la más severa que haya pasado", indicó. La cantante, en tanto, no ha perdido el contacto con algunos de sus seguidores que sufrieron heridas en aquel atentado y aún se comunica con algunos de ellos por Twitter, según contó en la entrevista. La también actriz y diseñadora de modas confesó que una de las cosas que la está ayudando a superar el estrés es trabajar. Hace algunos días presentó su trabajo "No Tears Left to Cry", su primer single del próximo álbum, "Sweetener". El síndrome por estrés postraumático es un trastorno mental causado por el trauma generado por un acontecimiento que causa angustia de naturaleza amenazadora para la persona, que, en muchos casos, se asociaba a los soldados que regresan de campos de batalla. El ataque terrorista en la ciudad británica se produjo el 22 de mayo de 2017 al término de un recital de la artista en el estadio Manchester Arena y causó 22 muertos, además de 64 heridos, la mayoría de ellos niños. Hace algunos días, en ocasión del primer aniversario del ataque, la cantante reveló en redes sociales su nuevo tatuaje detrás de la oreja, una pequeña abeja, símbolo del pasado industrial de la ciudad de Manchester, como tributo a las víctimas. (ANSA).