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"En este momento el diálogo con Italia es más necesario que nunca", dijo Moscovici ante los diputados de la comisión de Asuntos Europeos en la Asamblea Nacional de París.
Con Italia, sin embargo, "podemos tener un acuerdo sobre las reglas, acercarnos a esta regla, pero no puede haber una negociación de mercaderes de alfombras".
"En el tenis -dijo- cuando la pelotita cae sobre la línea, tal vez levemente hacia afuera, un árbitro indulgente puede dar por marcado el punto. Pero si lanzas la pelotita sobre las gradas, no hay árbitro que pueda dar el punto".
Hoy con Italia "la pelota está sobre las gradas, y la Comisión es el árbitro", concluyó el paralelismo.
Salvini no tardó en replicar: "El pueblo italiano no es un pueblo de mercaderes de alfombras o de mendigos. Moscovici sigue insultando a Italia, pero su sueldo lo pagan también los italianos. Ahora basta, se terminó la paciencia".
"Nosotros no retrocedemos", puntualizó Salvini en una entrevista con Rai 1, hablando de la confrontación con Bruselas.
"No retrocedemos porque el dinero que hemos puesto en el presupuesto concierne a la sanidad y el derecho a la salud no se toca. Hay una idea de Italia que crece".
"Si es por los italianos, no estamos dispuestos a renunciar a nada", dijo por su parte el premier Giuseppe Conte cuando se le preguntó qué cambiará Italia del presupuesto después del rechazo de Bruselas.
"El procedimiento de infracción -cuya apertura fue anunciada por Bruselas tras rechazar el presupuesto italiano- hay que debatirlo y yo creo en el debate. Confío en el diálogo y en la confrontación porque queremos explicar nuestras razones", dijo el vicepremier Luigi Di Maio, diciendo que no se puede sentir culpable si se ayuda a jubilados, desocupados y jóvenes.
"Tenemos un modo de afrontar la deuda diferente y comprendo que algunos se sientan desorientados, pero no se puede tratar así a Italia después de años de masacres", agregó.
"Queremos estar seguros de que haya un diálogo bueno y adecuado entre la Comisión y las autoridades italianas, la solución pasa a través de la discusión, queremos evitar consecuencias negativas que podrían propagarse al resto del continente", dijo el vicepresidente de la Comisión Europea Jyrki Katainen. "Queremos diálogo no solo con las autoridades italianas sino también con las otras partes de la sociedad, como el sector privado y los sindicatos", agregó.
La Comisión Europea rechazó el miércoles la Ley de Presupuesto de Italia por el "no respeto particularmente grave" de las reglas del bloque.
El rechazo de la Ley de Presupuesto 2019 abrió el camino al procedimiento para el déficit excesivo basado en la deuda externa, que representa el 131% del PIB -detrás de Grecia que encabeza el ranking- y ante la ausencia de medidas para superarlo.
"La deuda italiana sigue siendo la principal preocupación, Italia no está respetando el criterio de la deuda y por esto es injustificado un procedimiento para déficit excesivo", dijo Moscovici. (ANSA).
