Un plato tradicional, de esos que se comen con las manos y que cuenta con todos los beneficios que le aporta el ajo. Desde tiempos inmemoriales se le consideraba como el “espanta enfermedades”, ahuyentaba vampiros, epidemias y dolores.
Ingredientes:
- 10-15 dientes de ajo
- Aceite de Oliva
- Sal y pimienta
- Pollo troceado
- Romero
- Tomillo
- Laurel
- Vino
- Vinagre
Elaboración:
En una sartén con abundante aceite coloco los dientes de ajo con la piel, no dejo que se quemen, los voy moviendo para que el aceite se vaya aromatizando, cuando están blanditos los retiro. En ese aceite hago el pollo, coloco los trozos que previamente he salpimentado.
El pollo me gusta que este crujiente, así que le voy dando vueltas para que se haga por todas partes y lo dejo cerca de 25 minutos para que quede perfecto. Añado el laurel, un poco de romero y tomillo.
Cuando está preparado, le quito el aceite sobrante y añado un chorro de vino blanco, un toque de vinagre y los ajos que había retirado. Cuando el vino se ha reducido, ya tengo listo mi pollo al ajillo con aromas a campo.
Lo podéis acompañar de patatas fritas, arroz, una buena ensalada o con unos champiñones.
Espero que la disfrutéis!! (delascosasdelcomer.com)