Las estimaciones de flujos turísticos indican que ingresaron a la Península 5.700.000 visitantes más que en 2017 (1,4% más), aunque se desaceleró en comparación con el crecimiento del 4.4% alcanzado ese año.
Una vez más esto se debió a la presencia de extranjeros: en 2018 llegaron desde el exterior 214,3 millones (1,8% más respecto de 2017), mientras que el turismo interno se limitó a 212,2 millones (1,0% más).
La tendencia más positiva se registró en el sector hotelero, que tuvo un crecimiento del 1,9%, mientras que las otras ramas del turismo se limitaron al 0,3%. También se aprecian números positivos en todas las áreas, si bien la presencia de turistas aumentaron especialmente en el noroeste del país (2,3%) y el centro (2,5%). Este ritmo de crecimiento es decididamente superior al del sur y las islas (1,1%) y al del noreste (0,3%). Definitivamente, las zonas con mejor desempeño son las montañosas (2,8%) y las ciudades, centros del arte (2,3%). El balance resulta bastante positivo también para las localidades termales (0,9%) y la de los lagos (0,8%). Las empresas activas en las zonas balnearias se vieron afectadas por el retraso en la llegada del verano (0,2%).
También la facturación de las empresas dejan ver señales positivas: 0,8% más respecto de 2017. Sin embargo, solo crecieron las facturaciones de las estructuras hoteleras (1,3%), a diferencia de las no hoteleras que reportaron valores negativos (0,3% menos). Una vez más surge la diferencia de valores entre las distintas macro zonas: aumentó 2,1% la facturación de los entrevistados en la zona noroeste y centro, mientras que el saldo fue negativo para el noreste (-0,8%) y el sur e islas (-0,1%). Messina sostuvo que "el compromiso para el ajuste estacional en las zonas de montaña está dando sus frutos, con flujos turísticos en crecimiento durante todo el año".
"Preocupa, en cambio, la disminución de los turistas italianos. Un freno relacionado con la situación económica, que incidió fuertemente en las localidades balnearias del país, que sufrieron incluso la recuperación de los competidores mediterráneos", señaló.
A pesar de ello, sostuvo que "el año se cerró con crecimiento: señal de las grandes potencialidades del sector".
"El gobierno debe apoyar al turismo con mayor convicción, comenzando por la restauración de la bonificación de reurbanización para instalaciones de alojamiento", concluyó Messina.(ANSA).