La catedral de Siena descubrirá hasta el 25 de octubre su famoso pavimento de mármol, único no solo por la técnica (entre el mosaico y la taracea) sino también por el mensaje de sus representaciones, una invitación constante a la Sabiduría.
Habitualmente el precioso pavimento marmóreo está protegido de las pisadas de los visitantes y de los numerosos fieles. El piso es el resultado de un complejo programa iconográfico realizado a través de los siglos, desde el XIV hasta el XIX.
Los cartones preparatorios para los 56 mosaicos fueron diseñados por importantes artistas, casi todos de Siena, entre ellos Domenico di Bartolo, Matteo di Giovanni y Domenico Beccafumi, además del pintor "forastero" Pinturicchio, autor en 1505 del célebre recuadro con el Monte de la Sabiduría, figuración simbólica de la vía hacia la Virtud como alcance de la serenidad interior.
Además del pavimento, que solo se abre en algunos períodos especiales, se pueden visitar el Museo de la Obra de la catedral, la Sala de las Estatuas y otros sectores que permiten tener un cuadro de conjunto de la famosa obra que lleva desde la entrada al altar mayor. (Ansa)
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