Con un gol de penal del argentino Diego Perotti y otro del belga Radja Nainggolan, Roma venció 2-1 a Lazio en el derby capitalino que puso en marcha la decimotercera fecha del campeonato italiano de fútbol.
Ciro Immobile, quien estaba en duda para este partido por una dolencia física al igual que Nainggolan, acortó distancias para Lazio también desde los 12 pasos y, como consuelo, sigue en la cima de la tabla de artilleros, ahora con 15 goles.
El "giallorosso" de Eusebio Di Francesco fue más, pero lo refrendó recién en el complemento, cuando Perotti decretó el 1-0 a los 49' con un remate esquinado que el griego Thomas Strakosha adivinó, aunque no llegó a desviar.
El argentino, que había jugado algunos minutos en el amistoso que Argentina perdió increíblemente con Nigeria por 4-2 en Krasnodar, tomó la falta que el árbitro Gianluca Rocchi le sancionó al angoleño Bastos sobre el serbio Aleksandar Kolarov.
Apenas cuatro minutos transcurrieron para que Nainggolan estirase la ventaja en favor del hoy local en el Estadio Olímpico tras un balón recuperado por el propio Perotti y para sorpresa de los hinchas de Lazio.
Una ventaja que premió la búsqueda de la Roma y castigó a Lazio, que con ímpetu había logrado emparejar las acciones en un primer tiempo en el que ambos rivales contaron con opciones como para quebrar el cero en el marcador.
El bosnio Edin Dzeko contó con dos claras para la Roma en ese capítulo, una con un cabezazo que conectó con la nuca y se fue apenas ancho y la segunda, superada la media hora de juego, con una volea que obligó al lucimiento de Strakosha.
La ocasión más clara para Lazio la tuvo Insigne apenas comenzado el partido, pero fue anulada por Rocchi, que debió apelar al VAR (sistema de asistencia al árbitro) para determinar que el delantero estaba en posición adelantada al convertir.
El VAR "jugaría" después en favor del equipo de Simone Inzaghi y de Immobile, pues le permitió a Rocchi observar que el balón había impactado en la mano del griego Kostas Manolas dentro del área y sancionó penal.
Immobile, con frialdad, se paró frente al balón en el punto del penal y con un derechazo inatajable para el brasileño Alisson decretó el descuento de Lazio a los 72' sacándose la "mufa".
Y es que Immobile formó parte de la selección italiana que vio frustrada su clasificación al Mundial de Rusia 2018 al empatar sin goles en Milán con Suecia en la revancha del repechaje, tras caer por 1-0 en Solna en el duelo de ida.
El goleador del campeonato arrastraba ese dolor del alma, pero también una dolencia muscular previa al partido que se suspendió con Udinese por lluvias en la fecha anterior y estaba en duda para el clásico.
Lo mismo podría decirse de Nainggolan, que también llegaba "tocado" al duelo por una lesión que frustró su regreso a la selección de Bélgica, que sí se clasificó a la próxima Copa del Mundo, tras una sanción disciplinaria.
Roma ganó, como prometía en la previa Di Francesco y además de festejar triunfo en el derby superó en la tabla a su clásico rival, que llegaba un punto arriba y ahora cayó al quinto puesto, con un partido menos (el mencionado ante Udinese).
El "giallorosso", que tiene un partido pendiente desde la tercera fecha con Sampdoria también postergado por lluvias, llegó a 30 puntos y alcanzó en el tercer escalón a Inter, rival el domingo de Atalanta en el Giuseppe Meazza.
En Roma también fue titular el también argentino Federico Fazio e ingresó a cinco minutos del final el brasileño Juan Jesús, cuyos compatriotas Emerson y Leandro Castán permanecieron en el banco junto al mexicano Héctor Moreno.
Lucas Leiva jugó hasta los 58' en Lazio, que contó también con el brasileño Luis Alberto desde el primer minuto. Luiz Felipe y Mauricio fueron testigos preferenciales de la derrota junto al técnico Inzaghi.
Unos 56.000 aficionados se dieron cita en el Olímpico, en cuyas adyacencias se registraron desmanes que no pasaron a mayores en la previa y que se unió para recordar a Gabriele Sandri, hincha de Lazio asesinado por un policía hace 10 años.
"Ojalá la fiesta sea en paz", auguraba Di Francesco en la previa. Al final lo fue y la que festejó fue Roma, que vuelve a soñar con el "scudetto" que Juventus le negó en los últimos años más de una vez al acapararlo en las pasadas seis temporadas.
"Sufrimos un poco al final, pero merecimos ganar", comentó Nainggolan tras el partido, al afirmar que salir triunfadores en un clásico "es una inyección anímica y confirma que estamos en el buen camino".
"No quiero hablar del 'scudetto' porque nunca nos fue bien cuando lo hicimos. Hay que pensar un partido a la vez si queremos mejorar lo hecho en el campeonato pasado", explicó el belga, que no quería perderse por nada este derby y acertó.
A continuación, en el otro adelanto de la fecha, el líder Napoli salía al ruedo en San Siro para enfrentar a un Milan necesitado y tratar de lograr un triunfo que le permita cerrar en lo más alto de la tabla, pase lo que pase.(ANSA).
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