La colaboración nació con el objetivo de estudiar cómo la inteligencia artificial y los sistemas de aprendizaje automático pueden ayudar en el futuro a la industria de la moda, y en particular, a los clientes que cada vez más adquieren ropa y accesorios a través de Internet. Para empezar, los investigadores enseñaron a una red de neuronas artificiales cómo aprender a clasificar los gustos de las personas, aprovechando los datos de los compradores de Amazon en seis categorías: zapatos, camisetas y pantalones para hombres y mujeres. De este modo, se obtuvo un sistema, más eficiente que aquellos ya utilizados en los sitios de compras online, para sugerir productos de un aspecto similar a los que acaba de mirar el usuario. Luego, estas informaciones son utilizadas para ayudar a un sistema de inteligencia artificial a generar imágenes realistas de prendas basadas en las preferencias de los compradores. El "diseñador" artificial superó esta tarea aprovechando dos redes neuronales "gemelas": la primera diseña, mientras que la segunda determina si la imagen obtenida es realista. Todavía es muy pronto para decir si el sistema funcionará tan bien como para generar soluciones realmente "fashion".
A la espera de que afine su buen gusto, los investigadores deberán dotarlo incluso de un mecanismo que traduzca las imágenes bidimensionales en modelos 3D, utilizables para la producción de indumentaria.(ANSA).