Pedro Almodóvar muestra su sexualidad y el hecho de "haber sido un niño diferente" en su última película, "Dolor y gloria", en la que su actor fetiche Antonio Banderas interpreta a su alter ego.
"Aunque todas mis películas me representan, esta me representa más que ninguna. He ido un poco más lejos", dice Almodóvar en una entrevista a El País Semanal sobre "Dolor y gloria", que se estrena el 22 de marzo y en la que también participan Penélope Cruz, Leonardo Sbaraglia y Asier Etxeandia.
"Más que nunca -prosigue- mi alma está en la película, y eso no tiene que ver con que si ocurrió o no".
En el film, Banderas (Málaga, 1960) vive en una casa como la de Almodóvar, se viste como él y sufre enfermedades que el cineasta padece o ha padecido. "Algunas cosas son suyas y otras las he soñado, pero sí tengo claro que él está ahí dentro como nunca y yo tenía que entrar en su alma", cuenta el actor, protagonista de películas de Almodóvar como "Laberinto de pasiones", "Matador", o "La ley del deseo".
"Nunca me he sentido tan unido en un rodaje a Pedro como ahora y muy pocas veces en toda mi carrera me he sentido tan unido al director. Ni siquiera en los años 80, donde la dinámica era muy juguetona, llegamos tan lejos como ahora", añade.
Almodóvar, de 69 años, quien nació en el pueblo Calzada de Calatrava (Ciudad Real), apunta que "era un niño diferente, y eso sí está en la película" y está seguro de que su madre sufrió por su culpa "aunque no hablamos de ello. En el pueblo, en todos los pueblos, la gente es muy cruel".
Nunca habló con su madre sobre su sexualidad: "Aunque ella lo sabía, porque era mi madre y porque yo no me cortaba mucho. Pero no surgió, por respeto, y porque era mejor no hablar de las cosas que incomodaban", apunta.
Su madre "no fue nunca a ver mis películas, y eso que estaba muy orgullosa de mí. No era la típica madre del artista. Para ella era suficiente con mi éxito y con que teníamos una vida más cómoda", explica. Ella, Francisca Caballero, fallecida en 1999, a quien Penélope Cruz interpreta de joven, "intuía que mis películas no le iban a gustar. Y me parece muy bien. Es puro sentido común, y eso a ella le sobraba. "Dolor y gloria", apunta, "no tiene tanto que ver con mi relación con ella como con mi sexualidad y con el hecho de haber sido un niño diferente. El retrato más directo de mi madre está en "La flor de mi secreto". Allí Chus Lampreave es ella en cada frase".
En la película, según Banderas, "hay menos barroquismo que otras veces. Pedro ha depurado tanto su estilo que ahora hasta resulta minimalista". El director "tiene fama de ser un hombre muy fuerte. Y lo es.
Pero yo he descubierto una dulzura detrás que me emociona", dice Banderas.
Almodóvar espera que esta película, la número 21 de su carrera, no sea su "testamento cinematográfico". (ANSA).
 (Copia).jpg)
increase font size
