Muy emocionado y visiblemente nervioso compareció Enrique de Inglaterra para contar los detalles de su recién inaugurada paternidad. “Estoy muy emocionado de anunciar que Meghan y yo tuvimos un bebé esta mañana, un bebé muy sano. Estoy increíblemente orgulloso de mi mujer. Es maravilloso, estoy absolutamente encantado”, dijo el príncipe. Y añadió: “Estamos muy agradecidos por todo el cariño y el apoyo que nos han mostrado. Se ha retrasado, así que hemos tenido un poco de tiempo para pensar en los nombres, así que esa es la siguiente parte. No he estado en muchos nacimientos. Este es mi primer nacimiento. Fue increíble. Cada padre y madre dirá que su bebé es absolutamente increíble, pero esta pequeña cosa es para morirse. Estoy en la luna”, ha dicho. El príncipe habló en una zona del castillo de Windsor próxima a su casa.
El príncipe Enrique también comunicó que es muy probable que en el plazo de dos días presenten a su hijo. “Así podrán ver todos al bebé”.
Junto a Meghan Markle en Frogmore Cottage, se encuentra Doria Ragland. El nombre del niño se desvelará en los próximos días. Es costumbre en la familia real británica que se informe primero a la reina del elegido.
El príncipe Enrique durante su comparecencia. STEVE PARSONS AFP
El niño ocupará el séptimo lugar en la línea de sucesión al trono. No será príncipe. En su lugar recibirá el título de conde de Dumbarton aunque se espera que el bebé tome el apellido Sussex para la escuela o la guardería de la misma manera que los hijos de Guillermo y Kate, Jorge, Carlota y Luis usan Cambridge.
El sexo del bebé fue una sorpresa para el duque y la duquesa, que habían optado por no averiguarlo hasta el momento del nacimiento. Se espera que Enrique viaje a La Haya el próximo jueves para asistir a un acto de los Juegos Invictus.
Los duques de Sussex han querido diseñar la llegada de su hijo a su estilo evitando una gran exposición mediática como sucedió cuando llegaron al mundos los tres niños de los duques de Cambridge. En un comunicado oficial, Enrique y Meghan dijeron que planeaban mantener en privado los planes para el nacimiento de su bebé, a diferencia de los duques de Cambridge que escogieron el Ala Lindo del Hospital St. Mary’s en Paddington.
El País