«Mi responsabilidad como presidente indígena y de todos los bolivianos es evitar que los golpistas sigan persiguiendo a mis hermanos y hermanas dirigentes sindicales, maltratando y secuestrando a sus familiares», señala el texto, cuya autenticidad fue confirmada a Efe por fuentes del Senado.
La remisión de la carta se realizó después de que Morales confirmara su renuncia mediante una declaración grabada que fue difundida la tarde de este domingo.
En el texto, Morales condena que en Bolivia se siga «hostigando y persiguiendo» a indígenas, dirigentes y responsables de su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS).
«Hoy es el momento de la solidaridad entre nosotros y nosotras, mañana será el momento de la reorganización y el paso al frente de esta lucha que no termina con estos tristes sucesos», agrega.
La nota, que destaca varios de los logros de su gestión, menciona la consigna de «resistir» y finaliza con la arenga «¡Patria o Muerte!».
A la carta del mandatario también se suma la del vicepresidente del país y presidente de la Asamblea Legislativa de Bolivia, Álvaro García Linera, que apunta que se vio obligado a dimitir «obligado» por un golpe de Estado y por «fuerzas oscuras que han destruido la democracia».
Se espera que el Legislativo convoque a una sesión extraordinaria para elegir a un sucesor que podría ser la senadora de la opositora Unidad Demócrata (UD) Jeannine Áñez, que es también la segunda vicepresidenta del Senado.
Añez es la principal opción en la cadena de sucesión constitucional tras la renuncia de García Linera, la presidenta del Senado, Adriana Salvatierra, de la Cámara de Diputados, Víctor Borda, y el primer presidente del Senado, Rubén Medinaceli, todos miembros del partido oficialista.
La Organización de Estados Americanos (OEA) difundió el domingo un informe advirtiendo de graves irregularidades en las elecciones del 20 de octubre tras las que Evo Morales fue proclamado vencedor para un cuarto mandato consecutivo hasta 2025.
Morales seguidamente anunció nuevas elecciones con un nuevo órgano electoral, pero la oposición y comités cívicos respondieron que la única salida era su renuncia y, mientras la tensión fue aumentando en el país, por la tarde comunicó que dejaba el poder.
En su discurso de renuncia, acusó a la Policía de haberse sumado a un «golpe» para echarle del poder, lo que ha sido negada por los líderes de la oposición y cívicos que encabezaron las protestas en su contra.
La dimisión del mandatario ocasionó además una cadena de renuncias de legisladores, ministros y autoridades regionales del partido oficialista. EFE