Fiorentina y Atalanta, que chocarán el miércoles en la revancha por las semifinales de la Copa Italia y vienen de sacar pasaje a esa misma instancia en la Conference League y en la Europa League, respectivamente, animarán mañana dos duelos importantes pensando en clasificarse a las próximas Copas europeas.

Será ante la colista y virtualmente descendida Salernitana, en el caso del equipo de Florencia, y frente a un Monza que también sueña con jugar un torneo continental, ambición que persigue Torino, que recibirá en la misma jornada a un Frosinone en zona de descenso al igual que Sassuolo, penúltimo de la clase que se jugará una de sus últimas fichas en pos de mantener la categoría ante un más holgado Lecce. 

Pensando en esa revancha por Copa Italia, tras la victoria por 1-0 obtenida en Florencia, el equipo de Vincenzo Italiano presentará en Salerno un equipo alternativo en el que faltarán Andrea Belotti y los argentinos Lucas Beltrán y Nicolás González, artífice este último de uno de los goles en tiempo suplementario que aseguró el pasaje a semifinales en la Europa League frente al Viktoria Plzen.

Para el duelo en el estadio Arechi, Fiorentina tampoco contará con Giacomo Bonaventura, ausente en el duelo por cuartos de final del torneo continental, con el juvenil Pietro Comuzzo, afectado por un estado febril, ni con el angoleño M'Bala Nzola, desafectado del plantel desde hace dos partidos por problemas personales, según indicó el club.

Algunos juveniles completarán la lista de convocados por Italiano para intentar volver al triunfo en el campeonato que Fiorentina no celebra desde que superó por 2-1 a Lazio el 26 de febrero, situación por la cual cedió bastante terreno y hoy ocupa el décimo puesto con 44 unidades, a 11 de una Roma que hoy por hoy atraparía el quinto boleto del "Calcio" a la próxima Champions.

Más allá de la actualidad del rival de turno, que cierra las posiciones con apenas 15 unidades y que celebró apenas dos victorias en un campeonato en el que sufrió 21 derrotas, la misión no se anuncia fácil para Fiorentina, puesto que en Salerno y por el torneo de primera división nunca cantó victoria (sufrió una derrota por 2-1 y logró un empate en tres goles con su actual entrenador).

"Mañana nos espera un partido difícil ante un rival que está haciendo un buen campeonato, que está en semifinales de la Copa Italia y que avanza en la Conference League", advirtió Stefano Colantuono, técnico de una Salernitana prácticamente condenada y que tendrá que estar muy atenta -dijo- "si no queremos complicarnos la vida solos".

"Necesitamos un resultado positivo a pesar de que también nosotros tendremos algunas bajas en el plantel", explicó al enumerar entre los ausentes al griego Kostas Manolas, al eslovaco Norbert Gyomber, al alemán Jerome Boateng, a Giulio Maggiore, al chipriota Grigoris Kastanos y al suspendido maliense Lassana Coulibaly.

"Antonio Candreva cumplirá mañana 500 partidos en Serie A y esperamos poder regalarle un buen resultado, al igual que a nuestros aficionados, que siempre dijeron presente a pesar de las circunstancias", completó Colantuono.

Atalanta, que viene de eliminar nada menos que al Liverpool en cuartos de final de la Champions, tras ganarle por 3-0 en Anfield y caer por 1-0 en Bergamo, intentará aprovechar ese envión anímico cuando visite mañana a un Monza que con 43 puntos está uno por debajo de Fiorentina y a ocho de distancia del equipo de Gian Piero Gasperini, séptimo con un partido menos (que no jugó frente al equipo de Florencia).

La derrota frente a Cagliari y el empate con Hellas Verona frenaron a Atalanta, que en la recta final del torneo tendrá un sólo duelo directo, ante la Roma en trigésimo sexta fecha como local, después de enfrentar a Empoli, Salernitana y Lecce y antes de jugar con Torino en la última (al final del campeonato recuperará con Fiorentina).

Mientras Gasperini desoja la margarita para definir el once inicial, su colega Raffaele Palladino deberá renunciar a Dany Mota Carvalho, Patrick Ciurria y al ecuato-guineano José Machin, pero recuperará a Samuele Vignato y a Danilo D'Ambrosio, anticipó en la previa.

"Este es un plantel competitivo que siempre encuentra el estímulo necesario para salir a ganar. Mañana será una buena oportunidad para hacerlo ante un rival ante el cual nunca sumamos puntos", explicó el DT.

Noveno con 45 puntos marcha Torino, que tras igualar sin goles en el clásico con Juventus luego de caer con Empoli, necesita volver la victoria que no festeja desde que superó por 1-0 a Monza en la trigésima fecha si pretende mantener su aspiración de jugar una Copa.

"Lograr el objetivo sería fantástico y en eso estoy concentrado.

No pretendo interrumpir nada. Con mi cuerpo técnico estamos pensando sólo en trabajar. Por el resto, pregúntenle a otros", dijo el croata Ivan Juric al aludir a las dudas respecto de su continuidad.

"Debemos enfocarnos en hacer un buen cierre de temporada solamente y el público seguramente nos acompañará como hasta ahora", dijo en la previa del duelo en el Estadio Gran Torino que se anuncia colmado por unos 24 mil aficionados frente a Frosinone.

Los de Eusebio Di Francesco llegan precedidos por tres empates (Genoa, Bologna y Napoli), pero necesitan imperiosamente sumar de a tres para intentar salir del antepenúltimo puesto, uno por delante de un Sassuolo que también mantiene chances y deberá refrendarlas este domingo frente a Lecce.

"Es un partido que puede dar respuestas similares al que jugamos con Empoli (triunfo), pero no pienso en los rivales, sino en el partido que debemos hacer nosotros", explica Luca Gotti, técnico de un Lecce que no puede relajarse pues está cinco puntos por encima de la zona roja.

"Sassuolo es un equipo con calidad y con jugadores que pueden desnivelar en el mano a mano, por lo que deberemos defender en equipo porque de eso dependerá el resultado", agregó al aclarar que "los siete equipos que luchan por la permanencia siguen con vida y nosotros todavía no estamos salvados". (ANSA).