Juventus visitará mañana al líder Napoli en el duelo más esperado del año, uno de los dos que pondrán en marcha la decimosexta fecha, y viaja a territorio "enemigo" con el argentino Gonzalo Higuaín como estandarte.
Así lo confirmó Massimiliano Allegri, DT del hexacampeón del "Calcio" que inicialmente parecía orientado a no arriesgar al "Pipita", apenas operado de una fractura en su mano izquierda, pero debió incluirlo entre los convocados casi por "necesidad".
"A Higuaín le sigue doliendo la mano, pero confío en poder contar con él. Veremos cómo sigue, pero no voy a arriesgar a un jugador por un partido cuando quedan otros 30 por delante", advertía temprano Allegri.
Pero al final de la última práctica del día debió volver sobre sus pasos y terminó convocando al delantero argentino en la lista de los que viajarán a Nápoles porque el croata Mario Mandzukic acusó una dolencia muscular que obligó a descartarlo.
Mandzukic, con problemas en la pantorrilla izquierda, era el candidato a ocupar la posición que habitualmente ocupa Higuaín, baja a la que se sumó la del alemán Benedikt Howedes, con una dolencia en el cuádriceps femoral de su pierna derecha.
Dos malas noticias de último momento y dos casos que suman preocupación ante la alarmante cantidad de lesionados que azota al "Calcio", una situación que afecta no sólo a Juventus y a la que se refirió hoy el diario "La Gazzetta dello Sport".
El periódico recordó que en la decimotercera fecha del torneo, 40 jugadores se vieron impedidos de disputarla por distintas lesiones, 15 de ellas de índole muscular y ocho por rotura de ligamentos cruzados.
La cifra, explica el diario, representa apenas un lesionado menos respecto de los que se registraron a lo largo de toda la pasada Champions League, que consagró bicampeón a Real Madrid y cuya final jugó justamente Juventus.
Hoy, el equipo turinés vuelve a soñar con la posibilidad de pelear por ese título, mientras intenta revalidar por séptima temporada consecutiva el "scudetto", una carrera en la que, al menos por ahora, Napoli le saca ventaja.
Cuatro puntos, para ser precisos, son los que el equipo de Maurizio Sarri tiene de distancia con Juventus, el doble de la que le lleva al escolta Inter, que intentará aprovechar esta jornada en la que sus rivales directos chocan entre sí.
"Napoli es favorito a ganar el 'scudetto'. Está haciendo una gran campaña y hay que felicitarlo", advierte Allegri, aún cuando asegura que no firmaría el empate por nada del mundo mañana en el San Paolo.
"No firmo el empate aún cuando nos sirvan dos resultados de tres", desafió Allegri, quien además de tener que pensar en la estrategia y de lidiar con las lesiones imprevistas, también debió salir a aclarar que no hay internas en su plantel.
"El plantel está unido, aunque sentí algunos rumores y realmente esperaba que se golpeasen, porque cada tanto un poco de lío en el vestuario viene bien para elevar la tensión", comentó sobre la supuesta riña entre históricos y extranjeros.
Tal vez como símbolo de esa unión que pregona, Allegri apostó por convocar a Higuaín, quien no se descarta que pueda jugar desde el primer minuto, aunque su presencia parece apuntar en realidad a un intento por amedrentar al rival.
Y bien sabe Napoli del peligro que representa en cancha un delantero como el "Pipita", cuyos goles festejó por docenas y también, aunque en menor medida, padeció luego cuando el argentino ya defendía la casaca de Juventus.
Una afrenta que no le perdonan esos mismos fanáticos que tanto lo amaron y que en algún momento llegaron a compararlo con su compatriota Diego Maradona, una especie de Dios en Nápoles por sus hazañas y éxitos en cancha.
Hoy no es un argentino el que está más cerca de alcanzar a Maradona en Napoli, sino un eslovaco: el capitán Marek Hamsik, no porque despierte las pasiones que despertaba aquel, sino porque está a sólo un gol de su record histórico.
Hamsik lleva convertidos 114 goles con la casaca de Napoli y qué mejor ocasión para igualar la marca de Maradona que haciéndole un gol a Juventus, el eterno y odiado rival del Norte rico de Italia.
El eslovaco ya le marcó ocho a la "Vecchia Signora" en 29 enfrentamientos, uno en cada uno de los últimos dos por el campeonato y por la Copa Italia, aunque este año entre el torneo local y la Champions sólo festejó uno frente a Cagliari.
Por eso no se obsesiona con superar el record, pues su función es la de asistir al tridente ofensivo encabezado por el belga Dries Mertens, un "nueve improvisado" que lleva convertidos diez en el certamen.
En su olfato y en lo que puedan aportar el español José María Callejón y Lorenzo Insigne radican las ilusiones de Napoli de confirmarse como el equipo más ganador del campeonato, con 12 triunfos y, de paso, estirar su ventaja sobre Juventus.
La tarea de los brasileños Allan y Jorginho en el mediocampo también será vital para cortar los circuitos de Juventus, pues aún cuando Napoli es un equipo que piensa más en el arco rival que en el propio, tampoco es cuestión de regalarse.
Más aún si enfrente está el argentino Paulo Dybala, que había arrancado a toda máquina la temporada y luego se frenó (pese a lo cual cosechó 12 festejos en el campeonato), y quien ocuparía la posición de Higuaín si el "Pipita" no fuese titular.
Algo más de 50.000 almas (se espera un record de recaudación) los aguardan en el San Paolo, que se anuncia será una caldera para recibir al campeón del "Calcio" y a su ex artillero, al que Juventus lleva a Nápoles como "arma psicológica".(ANSA).
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