"Hermanos comandantes, oficiales de las Fuerzas Armadas de Brasil, díganle a mi nombre a su comandante (que) no vamos a permitir golpes de Estado en Brasil, ni en Suramérica, ni en América Latina y personalmente nuestro proceso va a defender a la presidenta de Brasil", dijo el gobernante en la región de Cochabamba (centro).
Añadió que también defenderá al gobernante Partido de los Trabajadores (PT) y sus integrantes, quienes "hicieron mucha historia", según dijo.
La crisis económica y los escándalos de corrupción en la empresa petrolera estatal Petrobras han herido la imagen de la mandataria y han espoleado masivas protestas, como las que el pasado domingo llevaron a las calles del país a cerca de un millón de personas que exigieron la destitución de la mandataria.
Los sectores sociales brasileños leales a Rousseff y gobiernos afines de otros países ven que detrás de esas protestas hay afanes de derrocar a la presidenta supuestamente promovidos por grupos conservadores.
Morales sostuvo hoy que los golpes de Estado "militares y civiles" han sido usados por "el imperio norteamericano y las potencias" para "dominar" a los países latinoamericanos.
"Esa es la historia de América Latina y el mundo, las oligarquías siempre tratarán de conspirar (contra) la liberación de nuestros pueblos", manifestó.
Según el mandatario boliviano, el continente ya no está "en tiempos de oligarquías, ni jerarquías, ni monarquías" y expresó su confianza en que la supuesta alerta de un golpe de Estado militar en Brasil "sea solamente una cuestión mediática".
"Es nuestra obligación defender los procesos democráticos, la democracia y especialmente procesos de liberación sin injerencia externa", añadió. (EFE)