Si no dispones de mucho tiempo para cocinar pero quieres disfrutar de esta receta, puedes prepararla con brócoli congelado. Ya está listo para cocinar por lo que ahorrarás tiempo en la preparación y sin renunciar a la calidad en ningún momento (cosechamos el brócoli a mano durante los últimos meses de otoño y los floretes se seleccionan en su punto óptimo de maduración).
Ingredientes para 4 personas
- 1 brócoli de buen tamaño
- Harina de trigo a demanda
- 2 o 3 huevos
- Pan rallado a demanda
- Sal
- Aceite de oliva
Cómo hacer brócoli rebozado
Primero corta el brócoli en floretes, más o menos del tamaño de la imagen (también puedes hacerlos más pequeños cortando éstos por la mitad o en cuatro). Una vez los tengas lavados y cortados, introduce en agua hirviendo con una pizca de sal para blanquearlos.
Blanquear la verdura significa cocerla durante tan solo unos segundos en el agua hirviendo. De esta forma conseguimos un brócoli limpio, tieso y de color verde brillante. Añade los floretes y sácalos del agua cuando vuelva a hervir de nuevo. Esta es la clave para que te queden bien crujientes y ricos. No queremos un brócoli blandurrio y aceitoso.
Ahora viene el kit de la cuestión, el rebozado de harina, huevo y pan rallado. Para prepararlo, utiliza tres platos o bols. Uno para la harina, otro para el huevo batido (recuerda añadir sal) y otro para el pan rallado.
Coge un florete, añade una pizca de sal y mezcla ligeramente con la harina de trigo. Sin apretar o presionar. Después pasa este florete enharinado por el huevo batido y mueve con un tenedor para que el mismo huevo se impregne bien en la verdura. Este paso es importante para que el rebozado quede perfecto. Por último, coloca el brócoli con harina y huevo sobre el pan rallado y mueve/presiona ligeramente hasta que el pan quede bien fijado en toda la superficie del brócoli.
Ya tienes tu primer florete rebozado. Repite este mismo paso con el resto de floretes de brócoli. Como verás es muy sencillo, lo importantes es tomárselo con tranquilidad y tener paciencia al rebozar los floretes para que queden bien cubiertos con la mezcla.
Ahora que tienes todo el brócoli rebozado solo te falta freírlo. En un cazo profundo o en una sartén de freír añade 3 o 4 dedos de aceite o hasta que el brócoli vaya a quedar cubierto al menos por la mitad. Calienta el aceite y cuando esté bien caliente añade varios floretes, uno a uno y con cuidado de no añadir demasiados y que se cuezan. Fríe bien y voltea si es necesario para que se haga de uniformemente. No lo mueves ni toquetees mucho durante la fritura.